Volver a Casa...

Tengo muchos sentimientos e ideas que acomodar aún, de futuro y de pasado, pero como volví a "casa" mejor me centro en el presente.
Lunes. Bajé del avión, la compañía Iberia había "olvidado" mi equipaje en Madrid, dos horas de espera para reclamaciones (con la esperanza que mi maleta estuviera por ahí...) Y es que si de por sí es molesto que pierdan tus cosas, lo que llevaba en ella (además de mi ropa que en dado caso se vuelve a comprar) no eran souvenirs, no; eran pedazos de mi vida que fuí juntando día a día... Txiqui me esperaba desde hacía más de 2 horas en la terminal de internacionales, un gustazo verlo! En el camino, las palabras se tropezaban pues querían sacar de golpe en 30 minutos lo vivido en dos meses. Café, un bocadillo de lomo/queso/pimiento, cigarros y las novedades. Por la noche vino tinto, visitas de David y Martha; se fueron. Llamaron mis padres.. malas noticias... el motivo por el que volví a Barcelona se escapaba a través de un auricular. "Lo siento pero no se pudo" - dijo mi padre. "¿Qué me compraste?" - dijo mi madre. Bien, todo bien, si, bla bla bla (bla bla). "Yo también los quiero, llamaré para año nuevo" - me despedí.
Toqué a la puerta de Txiki, que dormía, y me solté a llorar. Era tanto mi dolor y angustia!! Dejé lo que amo por lo que ambiciono y me quedé sin uno, sin otro y con muchos meses para reunir el dinero de otro pasaje. No había caso. Me culpé, lloré.
Martes. Despierto y ¿para qué? me vuelvo a la cama... está vacía... me levanto, camino hacia la computadora buscando a quien sea, pero nada... Mira! aquí esta mi maleta, reviso y desempaco, pero sólo saco aquello que temí perdieran, lo demás no importa, ya habrá tiempo. Llegan mis compañeros de piso, comemos (muy rico, por cierto). Vino tinto, visita de Jenny, vino tinto, reseña del viaje, vino tinto, me acuerdo de él, vino tinto, música de mariachi, vino tinto... 4 botellas de vino y una de cava, me dejaron haciéndole compañía un muy buen rato al water, me dolía la garganta, la cabeza y el corazón. Tremenda borrachera!! Sentada en el piso del baño, sin haberme quitado la pijama por dos días enteros (patética escena). Ahogándome de tanto llanto, a la cama de nuevo.
Miércoles. Sigo llorando, pero bueno, al final si haré algo parecido a lo que me regresó a España, no es lo mismo, pero es mejor que quedarse sabiendo que volví para nada. Resaca: Conciencia de el exceso y pago de consecuencias... Decido que hoy tampoco quiero salir, enciendo la compu al tiempo que tras de mí se libra una batalla campal. Pelan por la lavadora, por los platos sucios, pelean por el simple hecho de ser personas diferentes que llegaron de fuera, se encontraron con los de aquí. Convenientemente se pactó "convivir" a cambio de condiciones monetarias. Pero somos 5 pesonas que no compartimos nada, salvo a veces la cena y el espacio en qué vivir. Yo, no tengo vela en este entierro, no estuve así que me vuelvo a la cama... Pero, aunque lo postergara, tendría que volver a salir y reincorporarme al mundo que elegí. Si, yo lo elegí.
Por la noche lo vuelvo a ver, tres días después de habernos abrazado. Esta ahí, su cara, sus palabras... pero intermedia una pantalla... Qué felicidad y qué tristeza!! "¿Cómo estas mi amor?!!!!!!!!!!!!"... ... ...
Jueves. Volver a trabajar, llevar a revelar las fotos (las entregan hasta el martes). Los pleitos siguen en casa. Es 30 de diciembre, termina un año especial en mi vida. Vine a España con ilusión y regreso con indiferencia. Sin embargo ha sido un pueblo noble que dió cobijo a mis sueños, no soy mal agradecida y aquí he vivido momentos de inmensa alegría, pero los intereses cambian y por uno u otro motivo aquí estoy. Sientiéndome atrapada por el sitio que un día creí me daría libertad. Sólo tengo un amigo en la "tierra de la z". En el ruido hay mucha gente, pero en el silencio sólo un amigo. A un día para que finalice el año no tengo a nadie con quien recibir el 2005.. y la verdad que me da igual, los que quiero y me quieren estan muy lejos. Por mi decisión...
Son fechas marcadas para compartir, en donde la soledad se hace más densa. Si, esa soledad que me ha acompañado en esta aventura; disfrazada, olvidada o intercambiada, pero en fechas en que los seres se reune con el corazón, la desolación se deja sentir. La noche de navidad, vi a personas conectadas en internet solas, sentadas en sus maquinitas... "pobres" - pensé. Los entiendo... Seis personas me faltan este fin de año, los tengo en el alma, pero físicamente no... Esas, esas las escenciales, las que no deben faltar pero faltan... Jorge, Alberto, Galileo, César, Mamá y Papá... Así que seguro mañana seré como esos que buscaban en el messenger la verdadera sonrisa, o quizá me vaya a la cama y por las horas de diferencia despierte sólo para hacer las llamadas.
Despido el 2004 reviviendo los recuerdos y agradeciendo lo mucho que me dió; recibo el 2005 esperando... sólo esperando.
Earween*
0 comentarios